Guia Completa del Parque del Jaguar

 

Parque del Jaguar, Tulum

Guia para viajeros

¡Hola, viajeros! Si hay algo que nos encanta hacer cuando estamos viajando, es explorar nuevos rincones llenos de belleza natural y, sobre todo, disfrutar de la libertad de recorrer la ciudad en bicicleta. Esta vez, Julio y yo decidimos lanzarnos en una aventura al Parque del Jaguar, y vaya que fue una experiencia increíble. Salimos desde nuestro hotel ubicado en la Región 15, pedaleando con la brisa del mar en la cara, y en unos 25 minutos llegamos a la entrada del parque. 

Llegamos alrededor de las 9 de la mañana, justo cuando el sol estaba en su punto perfecto, y desde ese momento, sabíamos que iba a ser un día memorable. Así que prepárate, porque te voy a contar todo sobre lo que nos esperaba en este paraíso  en Tulum.

Al llegar a la entrada, nos sorprendió la belleza del lugar. El costo de entrada es de $415 pesos mexicanos por persona, lo cual incluye acceso a varias atracciones increíbles dentro del parque, como las playas, el faro, el Museo de la Costa Oriental, el mirador y el uso de los shuttles para moverse entre las diferentes paradas del parque.

Paradas del Parque del Jaguar: Un Recorrido por el Paraíso

Comenzamos nuestro recorrido en bicicleta hacia la primera parada del parque:

 1. Templo Mirador, y vaya que fue un comienzo épico. Al llegar, nos encontramos con unas vistas espectaculares que simplemente nos dejaron sin aliento. Desde lo alto, pudimos ver cómo las olas del mar se estrellaban contra enormes rocas, creando un paisaje impresionante. Estar allí, rodeados de la majestuosidad de la naturaleza, fue como estar en un lugar mágico donde el mar y las piedras se encuentran en perfecta armonía. Definitivamente, un punto de partida que nos preparó para todo lo que aún nos quedaba por descubrir en este paraíso.

2. Playa Mangle, un rincón de Tulum que nos dejó completamente fascinados. Al llegar, decidimos dejar las bicicletas bien amarradas y nos dirigimos a caminar por la hermosa playa turquesa que se extendía frente a nosotros. Las aguas cristalinas y la arena suave eran simplemente perfectas. Mientras caminábamos, tuvimos la suerte de ver al equipo de limpieza de playas de Tulum trabajando arduos para mantener el lugar impecable, retirando las algas que se habían acumulado. Nos tomamos un buen rato para disfrutar de la calma del lugar, antes de volver a las bicicletas y seguir nuestro recorrido hacia la siguiente parada. ¡Cada momento en Playa Mangle fue una pequeña dosis de paraíso!

3. Playa Maya, un lugar que no solo es hermoso, sino también muy cómodo. Al llegar, encontramos baños y agua potable para rellenar nuestras botellas, lo que fue perfecto para mantenernos hidratados en el calor. Dejamos las bicicletas y nos adentramos por un camino rodeado de vegetación que nos llevó directo a la espectacular playa de aguas cristalinas. Aquí, la arena suave y el mar turquesa nos dejaron sin palabras. Además, nos topamos con la famosa Playa Paraíso, que nos impresionó tanto como Playa Maya, con su belleza intacta y su ambiente tranquilo. En esta entrada también está el restaurante  Pancho Villa, un lugar ideal para disfrutar de una comida o bebida, con mesas directamente en la arena para que puedas relajarte mientras contemplas el mar. 

Decidimos dejar nuestras bicicletas bien amarradas en la estación de Playa Maya y aprovechar el servicio de shuttle del parque para llegar a las demás paradas. Fue una excelente decisión, ya que nos permitió relajarnos y disfrutar del recorrido sin preocuparnos por el calor ni por el tiempo. Los shuttles son muy cómodos y eficientes, lo que hizo que cada traslado entre paradas fuera rápido y sencillo. Así, pudimos continuar explorando el parque de manera tranquila, sin perder ni un minuto de esa maravillosa experiencia. ¡Una forma perfecta de seguir descubriendo todos los rincones del parque sin esfuerzo!

4. Museo de la Costa Oriental, una parada que nos abrió una ventana fascinante al pasado. Este museo es una verdadera joya para los amantes de la historia, ya que nos cuenta la historia maya de la región, desde sus orígenes hasta su legado. Entre sus exposiciones, pudimos aprender sobre la biodiversidad local, las costumbres mayas y cómo este territorio fue tan importante para esta antigua civilización. Sin duda, fue un momento de aprendizaje que enriqueció aún más nuestra experiencia en el parque, sumando historia y cultura a la belleza natural que ya habíamos explorado. ¡Un lugar que no puedes perderte si visitas el Parque del Jaguar!

La siguiente parada del shuttle nos llevó al:

5. Mirador 360, y déjenme decirles, ¡fue simplemente impresionante! Desde lo alto, pudimos ver toda la jungla de Tulum extendiéndose ante nosotros, una vista panorámica que te deja sin palabras. No solo se ve el parque en su esplendor, sino que también tienes una vista increíble de las ruinas mayas y del mar Caribe en la distancia. Lo más genial de este mirador es que está diseñado para simular el calendario maya, lo que le da un toque muy único. Ahora, si no te dan miedo las alturas, ¡este es un lugar que no te puedes perder!

6. El Faro, desde ahí, las vistas del mar son de otro planeta, el color del agua se ve tan increíblemente turquesa que casi parece sacado de una postal. Es uno de esos lugares donde no sabes si quedarte mirando el horizonte o intentar capturar cada momento con la cámara. Desde el faro, tomamos la vereda que nos llevó a la Playa Santa Fe, un camino que va entre la vegetación y te regala vistas aún más hermosas del paisaje. Sin duda, si eres fanático de las vistas épicas, este es un lugar que no te puedes perder. ¡Es de esos momentos en los que piensas "esto sí que vale la pena!

7.  Playa Pescadores después de una caminata desde el Faro, siguiendo una hermosa vereda que nos llevó primero a Playa Santa Fe y, si seguías caminando a lo largo de la orilla del mar, ¡terminabas en esta maravilla! Playa Pescadores tiene una vibra tan pintoresca que parece sacada de una revista de viajes. Con el agua cristalina y los botes pesqueros reposando tranquilamente en la orilla, este lugar te transporta a un pequeño pueblito pesquero de esos que siempre quisiste visitar. Es el tipo de playa que invita a quedarse a contemplar la calma del mar, con la sensación de estar en un lugar secreto y especial. Y lo mejor de todo es que, tras disfrutar de esta belleza, seguimos caminando hasta llegar a Playa Maya, donde nos esperaban nuestras bicicletas amarradas, y, claro, el restaurante Pancho Villa para relajarnos con una bebida bien fría. ¡Un recorrido perfecto!

Después de disfrutar de una cerveza bien fría y una comida deliciosa en Pancho Villa (¡la comida estaba increíble, por cierto!), decidimos ponerle el broche de oro al día y visitar la parada del Acceso Conanp, que es donde están todas las tiendas, artesanías y un montón de cosas increíbles para llevarte de recuerdo. Eso sí, te recomiendo visitarlo por la tarde, porque en la mañana se forma una fila enorme para volver a entrar al parque por ahí. Mejor dejar esta parada para el final del recorrido, ¡créeme! Para cerrar el día como se debe, Julio y yo nos lanzamos a probar diferentes tipos de Mezcal y Tequila (y qué bien nos sentó). Además, en esta parada está el Museo de Frida Kahlo y varios letreros de Tulum perfectos para una sesión de fotos. Después de un par de catas de tequila y mezcal, nos montamos nuevamente en el shuttle para regresar a nuestras bicicletas y dar por terminado este increíble día en el parque. ¡Una manera épica de cerrar la aventura!

¡Y así concluye nuestra increíble aventura en el Parque del Jaguar en Tulum! Espero que hayas disfrutado del recorrido tanto como nosotros. Si te gustan las playas paradisíacas, la historia maya y un poco de diversión en la naturaleza, este lugar tiene todo lo que necesitas. Gracias por leerme y acompañarme en esta experiencia única. ¡Nos vemos en la próxima aventura! 🌴🌞

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